domingo, 24 de mayo de 2009

82 años de alegria y de un solo sentimiento...¡ te amo Universidad de Chile, gracias por existir!



ANFP.CL.- "Más que una pasión, son sentimientos". A finales de los años 80 el Club de Fútbol de la Universidad de Chile pasaba por una crisis deportiva y dirigencial. Incluso, al final de la temporada de 1988, tras una igualdad 2-2 como local ante Cobresal, la "U", por primera vez en su historia, descendía a la Segunda División (hoy llamada Primera B). Fue tal la desazón en la hinchada azul que muchos asistentes de ese día al Estadio Nacional se quedaron por largos minutos después de finalizado el compromiso llorando desconsoladamente.

Ese día de diciembre reflotó el sentimiento azul. Nació una pasión que se arrastra hasta nuestros días y que -independientemente de la suerte del equipo- se mantiene sagradamente. La pasión del león, esa que nunca acabará.

Los primeros antecedentes del Club de Fútbol de la Universidad de Chile se hayan en la primera década del siglo XX, específicamente con la disputa del primer "Clásico Universitario" entre las selecciones estudiantiles de las universidades de Chile y Católica, respectivamente, el 1 de noviembre de 1909. Pero el fútbol organizado en la "U" nació sólo en 1923 con la creación de la Federación Deportiva de la Universidad de Chile, institución que fue presidida por Arturo Flores Conejeros.

En los años 30 el club pasó a formar parte de la Primera División de la Asociación de Fútbol de Santiago de la cual, coronándose campeón de la sección amateur en 1934. En estos primeros planteles destacaron los jugadores Víctor Alonso y Luis Tirado, quien posteriormente llegó, como entrenador, a ser campeón, por primera vez en el profesionalismo, en 1940.

Su primer título y el mítico Ballet Azul

El 29 de mayo de 1938 debutó oficialmente en el fútbol profesional enfrentando en los Campos de Sports de Ñuñoa a Magallanes. En sus primeras dos campañas en el profesionalismo Universidad de Chile alcanzó lugares en la medianía de la tabla, y en donde destacó la figura del meta Eduardo Simián. El año 1940 la "U" grito por primera vez campeón. Bajo la conducción de Tirado y de la mano del goleador Víctor Alonso (marcó 20 anotaciones), los azules obtuvieron su primera estrella. Pero, pese a su primer éxito, tuvieron que esperar 19 años para volver a coronarse.

A partir de 1950, más las incorporaciones de Carlos Campos y Leonel Sánchez, la "U" vuelve a recobrar el protagonismo extraviado. En 1959 los laicos se consagraron por segunda vez campeones del torneo nacional, tras derrotar en partido de definición a Colo-Colo el 11 de noviembre por 2-1. Los goles azules fueron obra de Leonel Sánchez y Ernesto Álvarez. Allí comienza a escribirse otra historia y aparece la figura de uno de los ídolos máximos de la institución: el viejo y querido Leonel. Sánchez obtuvo seis campeonatos jugando por la "U" entre 1959 y 1969. Fue la década del Ballet Azul, cuya base de jugadores integró además la selección de fútbol de Chile que obtuvo el tercer lugar en el Mundial de fútbol realizado en nuestro país en 1962. Los azules levantaron la copa en 1959, 1962, 1964, 1965, 1967 y 1969.

25 años de sufrimiento

Si bien la década de los 70 comenzó de buena forma para los azules, alcanzaron las semifinales de la Copa Libertadores en 1970, el club entró en una profunda crisis económica y deportiva. Aunque en 1981 volvieron a alcanzar pasajes a la Copa Libertadores (clasificación lograda ante Colo Colo con el recordado gol de Arturo Salah), en el campeonato nacional no lograron alcanzar títulos y el tema administrativo estaba cada vez peor. Y así, no fue tanto asombro cuando la "U" tocó fondo y bajó a la Segunda División.

En 1989 la "U" jugó en el ascenso, llenando todos los recintos donde disputaba sus partidos. A finales de ese año, en un repleto Estadio La Granja de Curicó, los azules subieron nuevamente a la Primera División tras vencer al cuadro local por 3-0, siendo la figura el delantero Marco Fajre. Ya en el fútbol de honor, la "U" no pudo festejar sino hasta 1994, bajo la dirección técnica de un ex jugador azul, Jorge Socías, con el triunfo -las paradojas de la vida- sobre Cobresal (el mismo equipo que los hizo descender seis años antes) por 2-1. Ese día, en los pastos del Estadio El Cobre de El Salvador nació otro ídolo: José Marcelo Salas. En la plantilla campeona de 1994 destacaron figuras como los argentinos Sergio Vargas y Raúl Aredes, el paraguayo Rogelio Delgado, y los nacionales Patricio Mardones, Ronald Fuentes, Esteban Valencia, Víctor Hugo Castañeda, Luis Musrri, y Salas, por supuesto.

Universidad de Chile volvió a celebrar doce meses después tras vencer a Deportes Temuco por 2-0 en un colmado Estadio Nacional, de la mano del trasandino Leonardo Rodríguez.

En 1996 la "U" rozó la Copa Libertadores. Con la conducción del argentino Miguel Ángel Russo los azules llegaron hasta las semifinales del certamen internacional siendo derrotados injustamente por River Plate. En 1999 la "U" volvió a levantar el título con 34 partidos invictos, y con el record de 13 victorias consecutivas. En 2000 también festejaron. En esos dos años destacaron en el equipo dirigido por César Vaccia, Rodrigo Tello, Sebastián Pardo, Pedro González, Cristián Castañeda y el argentino Diego Rivarola. La última corona que obtuvo la Universidad de Chile fue en el Torneo de Apertura de 2004 (desde el año 2002 se juegan certámenes de Apertura y Clausura) en una dramática definición a penales ante Cobreloa en Calama.

Hoy en día la "U" está bajo las órdenes del técnico uruguayo Sergio Markarían, donde está entre los ocho mejores elencos que determinarán al campeón del Apertura. Tuvo una destacada actuación en Copa Libertadores y peleará un cupo para la Copa Sudamericana, a disputarse en el segundo semestre. Además el próximo 2 de junio, se despedirá definitivamente el fútbol profesional Marcelo Salas, el ídolo máximo en la historia del club, una institución plagada de sinsabores, pero con hinchas que le demuestran domingo a domingo su pasión infinita.

Datos:
-Títulos (12): 1940, 1959, 1962, 1964, 1965, 1967, 1969, 1994, 1995, 1999, 2000, 2004 (Apertura).

lunes, 18 de mayo de 2009

Un Padrenuestro latinoamericano (Mario Benedetti)


















Padre nuestro que estás en los cielos
con las golondrinas y los misiles
quiero que vuelvas antes de que olvides
cómo se llega al sur de Río Grande

Padre nuestro que estás en el exilio
casi nunca te acuerdas de los míos
de todos modos dondequiera que estés
santificado sea tu nombre
no quienes santifican en tu nombre
cerrando un ojo para no ver las uñas
sucias de la miseria

en agosto de mil novecientos sesenta
ya no sirve pedirte
venga a nos tu reino
porque tu reino también está aquí abajo
metido en los rencores y en el miedo
en las vacilaciones y en la mugre
en la desilusión y en la modorra
en esta ansia de verte pesa a todo

cuando hablaste del rico
la aguja y el camello
y te votamos todos
por unanimidad para la Gloria
también alzó su mano el indio silencioso
que te respetaba pero se resistía
a pensar hágase tu voluntad

sin embargo una vez cada tanto
tu voluntad se mezcla con la mía
la domina
la enciende
la duplica
más arduo es conocer cuál es mi voluntad
cuándo creo de veras lo que digo creer
así en tu omnipresencia como en mi soledad
así en la tierra como en el cielo
siempre
estaré más seguro de la tierra que piso
que del cielo intratable que me ignora

pero quién sabe
no voy a decidir
que tu poder se haga o se deshaga
tu voluntad igual se está haciendo en el viento
en el Ande de nieve
en el pájaro que fecunda a su pájara
en los cancilleres que murmuran yes sir
en cada mano que se convierte en puño

claro no estoy seguro si me gusta el estilo
que tu voluntad elige para hacerse
lo digo con irreverencia y gratitud
dos emblemas que pronto serán la misma cosa

lo digo sobre todo pensando en el pan nuestro
de cada día y de cada pedacito de día

ayer nos lo quitaste
dánosle hoy
o al menos el derecho de darnos nuestro pan
no sólo el que era símbolo de Algo
sino el de miga y cáscara
el pan nuestro
ya que nos quedan pocas esperanzas y deudas
perdónanos si puedes nuestras deudas
pero no nos perdones la esperanza
no nos perdones nunca nuestros créditos

a más tardar mañana saldremos a cobrar a los fallutos
tangibles y sonrientes forajidos
a los que tienen garras para el arpa
y un panamericano temblor con que se enjugan
la última escupida que cuelga de su rostro

poco importa que nuestros acreedores perdonen
así como nosotros
una vez
por error
perdonamos a nuestros a nuestros deudores

todavía
nos deben como un siglo
de insomnios y garrote
como tres mil kilómetros de injurias
como veinte medallas a Somoza
como una sola Guatemala muerta

no nos dejes caer en la tentación
de olvidar o vender este pasado
o arrendar una sola hectárea de su olvido
y ahora que es la hora de saber quiénes somos
y han de cruzar el río
el dólar y su amor contrarrembolso
arráncanos del alma el último mendigo
y líbranos de todo mal de conciencia
amén.

martes, 12 de mayo de 2009

¿QUÉ ES EL CREDITO UNIVERSITARIO?




Existen varios sistemas de Crédito para financiar los estudios universitarios de los alumnos más pobres del país. Entre ellos tenemos el Crédito del Fondo Solidario y el Crédito con Aval del Estado.

El crédito fondo solidario es un préstamo que realiza el estado y que se comienza a pagar dos años después de terminada la carrera, a un interés del 2% anual. Por ejemplo, si tu deuda es de 1 millón de pesos y demoras cinco años en pagar, tendrás que cancelar 100 mil pesos más.

El crédito con Aval del Estado funciona con un arancel de referencia definido por el Ministerio en 1999 y que se ha reajustado (no sabemos cómo) por el mismo ministerio. Los aranceles reales son definidos por la Universidad, la que puede subirlos sin ninguna restricción.

¿CÓMO SE PAGA EL CRÉDITO UNIVERSITARIO?

El crédito comienza a pagarse dos años después de egresar de tu carrera. Si tu carrera en total cuesta 5 millones, terminarás pagando 100.000 pesos más por cada año que demores en pagar la deuda. El pago mensual es del 5% de los ingresos, o sea que si tienes suerte y consigues un trabajo de 500.000 pesos, tendrás que pagar 25.000 pesos mensuales. Considerando estos datos, demorarías 25 años en pagar el crédito, sumando 2.100.000 pesos de intereses. ¿Qué tal?

En caso de no pago, te cobran una multa o te retienen la devolución de impuestos para cancelar tu crédito. El actual crédito Aval del Estado se suscribe con los bancos, es decir, es un crédito privado, por lo que las condiciones del crédito pueden cambiar con la sola voluntad del banco, sobre todo si tienes que repactar la deuda. Suma a ello lo que pagas cada año cuando la Universidad sube los aranceles, alejando el arancel real (cobrado por la u) del referencial (establecido por el gobierno).

¡¡¡ Y EL CUENTO SIGUE !!!

El Crédito Universitario se otorga sólo a las universidades del Consejo de Rectores y a los alumnos de menores ingresos, que son los que estudian para mejorar su situación económica y realizarse como personas, con grandes sacrificios de parte de ellos mismos y sus familias.

Y sin embargo, la “ayuda” del gobierno no es otra cosa que endeudar precisamente a los más pobres, para que sigas pagando toda la vida. Esto no fue siempre así, y no tiene porqué ser así, la educación es un derecho y por eso el estado está obligado a crear los mecanismos para que todos los que tengan la capacidad puedan educarse y desarrollarse.

Para eso se pagan los impuestos, cada vez que compras algo, tomas locomoción o haces un trámite. Es decir, que no sólo te estás endeudando, sino que estás pagando dos veces por el mismo servicio

¿QUÉ HACER?

Ya sabemos que todos los años peleamos por los fondos para el crédito, es decir, nos movilizamos para que nos permitan endeudarnos. Por eso es necesario crear conciencia sobre esta situación y enfocar nuestros esfuerzos en atacar el problema de fondo.

La propuesta histórica de los estudiantes ha sido y es el Arancel Diferenciado, es decir, que se le cobre a cada estudiante de acuerdo a la capacidad económica de su familia, para así dar reales oportunidades a todos.

Pero esta propuesta es sólo el primer paso. La meta final es una educación gratuita para todos. Para hacer esto hay que luchar por una educación estatal, que deje de ser un negocio de privados donde interesa que los estudiantes paguen a costa muchas veces de bajar los niveles académicos al suelo por tener más “clientes” que mantengan el negocio.